martes, 21 de mayo de 2013

A menudo pasamos de largo de nuestras vidas.

"¡Cuántas veces no estamos en lo que hacemos! Pasamos de largo...

De largo de nuestras alegrías. Todos esos domingos en los que se piensa en el lunes y no se aprovecha el descanso y el tiempo con los seres cercanos. Y después, esos lunes en los que uno se arrepiente de no haber sabido disfrutar del descanso, y en los que no se está disponible para lo que hay que hacer, y que acabamos haciendo con dificultades y sin gusto. Todo ello entraña retrasos, complicaciones, disgustos y nuevos estados de ánimo desagradables.

Al lado de las cositas sin importancia. Todas las veces en las que no se hace caso de lo que se nos dice, en las que se está ausente, en otro sitio. Todas las veces en las que hemos ido a algún sitio sin pensar, con el "piloto automático". Llegamos y nos damos cuenta de que hemos caminado o conducido en un estado ausente, en otro universo. No en la realidad, sino en nuestros estados de ánimo.

Al lado de los momentos importantes, cuántos "grandes momentos" atravesados en un estado ausente, donde uno se concentra en todo menos en lo esencial: el instante presente. Porque nuestra mente está atestada de tantas cosas y preocupaciones que no somos capaces de controlar ni desechar.

Hay momentos en que parece que toda nuestra vida toma la costumbre de pasar de esa manera, fuera de nosotros, de largo, delante de nosotros. Y nosotros la seguimos correteando detrás, intentando recoger los pedazos para llevar a cabo una reconstrucción coherente a posteriori, "repegando" recuerdos, fotos, reflexiones dispersas. Somos víctimas de la remanencia: el instante anterior devorando el instante presente. O de la anticipación y la inquietud: el instante posterior ocupa nuestros pensamientos. El instante presente deja de existir, ahogado en la nada.
Pero pasar de lado el presente, ¿no es pasar de lado la propia vida?"

Christophe André
Los estados de ánimo, el aprendizaje de la serenidad
Ed. Kairós



miércoles, 27 de marzo de 2013

Amar las preguntas, vivir las preguntas.

"...yo querría rogarle como mejor sepa hacerlo, que tenga paciencia frente a todo cuanto en su corazón todavía no esté resuelto. Y procure encariñarse con las preguntas mismas, como si fuesen habitaciones cerradas o libros escritos en un idioma muy extraño. No busque de momento las respuestas que necesita. No le pueden ser dadas, porque usted no sabría vivirlas aún, y se trata precisamente de vivirlo todo. Viva usted ahora sus preguntas. Tal vez, sin advertirlo siquiera, llegue a internarse poco a poco en la respuesta anhelada y, en algún día lejano, se encuentre con que ya la está viviendo también."

Extracto de "Cartas a un joven poeta" Rainer Maria Rilke




viernes, 8 de febrero de 2013

Un día de plena conciencia.

"...Mientras aún estés en la cama, empieza poco a poco a seguir la respiración de manera lenta, larga y consciente. Levántate después lentamente de la cama (en lugar de saltar de ella como de costumbre) alimentando la conciencia con cada movimiento. En cuanto te hayas levantado, cepíllate los dientes, lávate la cara y haz todas tus actividades matutinas de una forma tranquila y relajada,siendo plenamente consciente de cada uno de tus movimientos. Sigue la respiración, obsérvala y no dejes que tu mente se distraiga. Ejecuta cada movimiento con calma. Cuenta tus pasos de manera lenta y silenciosa. Mantén una ligera sonrisa en el rostro.
Pásate al menos media hora tomando un baño. Lávate con lentitud, sabiendo que lo estás haciendo, para que al terminar te sientas ligero y fresco. Después, si lo deseas puedes hacer tareas domésticas como lavar los platos quitar el polvo de las mesas y limpiarlas, fregar el suelo de la cocina y arreglar los libros de las estanterías. Sea cual sea la tarea que realices, hazla lentamente y con calma, sabiendo que la estás llevando a cabo, en lugar de intentar sacártela de encima cuanto antes. Decide hacerlo todo de manera relajada, poniendo toda tu atención en ello. Disfruta de la tarea y sé uno con ella. De lo contrario el día de plena conciencia no tendrá ningún valor. La sensación de que una tarea es un fastidio desaparecerá pronto si la realizas siendo consciente de ella."

Thich Nhat Hanh "El milagro de mindfulness"


miércoles, 9 de enero de 2013

ABRIR EL ESPACIO SUFICIENTE

Abrir espacio para que todo pueda estar, para que todo pueda ser e incluso haber sido, los dolores, los errores, la incertidumbre, las viejas descripciones acerca de nosotros mismos, las nuevas, las que están sin clasificar, la duda, los sentimientos y pensamientos imprevistos, la enfermedad.
La lucha, el intento de arrancar de nuestra vida lo que nos nos gusta, lo que duele, lo que no "debería" estar, nos asfixia, reduce nuestro campo de observación, nos secuestra de la experiencia y sus regalos.
Cuando en nuestra vida permitimos que haya el espacio suficiente que lo incluya todo, que les permita a las situaciones sucederse una tras otra y permanecer allí con lo que se despierte, sin importar su color o textura, generando un espacio amplio donde todo puede ser y a la vez transformarse, donde hay el suficiente aire para respirar mientras duele, mientras se ríe, mientras nuestra vida se sacude. 
Esta es una buena forma de empezar a trazar el camino de la aceptación, de dar la bienvenida a una forma mas flexible de relación con nosotros mismos y con la vida. Abrir el espacio suficiente para abrazar lo que venga...y lo que ha venido.


lunes, 26 de noviembre de 2012

Vivir en piloto automático.

"...Hay personas para quienes este "vivir en piloto automático" se ha convertido en un modo de vida habitual. Si durante la mayor parte de nuestra vida centramos nuestra atención en algo distinto a lo que estamos haciendo, podemos acabar sintiéndonos vacíos y entumecidos.  Cuando el pensamiento automático domina nuestro sentido subjetivo del mundo, la vida se vuelve repetitiva y monótona. La experiencia no proporciona una sensación de frescura y de descubrimiento novedoso como cuando un niño percibe el mundo por primera vez, sino que nos sentimos muertos por dentro "muertos antes de haber muerto".  La vida en piloto automático también nos hace correr el riesgo de reaccionar mecánicamente ante las situaciones sin haber reflexionado sobre las distintas opciones de respuesta de que disponemos.  El resultado pueden ser reacciones reflejas que, a su vez, provocan reflejos mecánicos en los demás.  Las cascadas de respuestas mecánicas que se refuerzan mutuamente pueden crear un mundo de interacciones irreflexivas, de crueldad y destrucción."

Daniel Siegel, "Cerebro y mindfulness" Ed. Paidós


jueves, 25 de octubre de 2012

Cada segundo es importante, cada actividad es vital.


Estamos acostumbrados a considerar el gran valor que tiene nuestro trabajo, la actividad con la que conseguimos el sustento, probablemente el reconocimiento y con suerte aquella que nos da satisfacción, con frecuencia nuestra vida gira alrededor de ella o en su ausencia a su búsqueda. Las horas dedicadas al trabajo parecieran estar justificadas o ser lo que debe ser, pocas veces nos cuestionamos. 
Sin embargo el día y la vida están llenos de otra serie de actividades que pareciera que las vivimos como sí fueran obligaciones añadidas que tenemos que solventar en poco tiempo, prefiriendo que otro las haga por nosotros y dedicándoles poca energía y atención.
Cocinar, comer, limpiar, cuidar de nosotros y de los otros son actividades vitales tanto como conseguir "el pan de cada día" pero lo perdemos de vista, intentamos hacerlo todo en el menor tiempo posible, queriendo deshacernos rápidamente de la "obligación" para ir a hacer "otra cosa", estamos siempre corriendo detrás del tiempo y probablemente es allí donde reside lo que tanto estamos buscando, la calma y la tranquilidad: en dejar de correr, en darle a cada actividad el valor que se merece es decir, el tiempo y la atención, nuestra presencia.
Alimentarse es vital para estar en el mundo, mantener limpio el espacio en el que nos desarrollamos y compartimos es vital para sentirnos a gusto en nuestro lugar, poder estar presentes al momento de relacionarnos nos permite crecer en cada relación, cada segundo es importante, cada minuto dedicado a la actividad que sea es vital.
¿Que pasaría si viviéramos "como si" todo lo que hacemos durante el día fuera importante, y le dedicáramos toda nuestra atención? Por lo menos podríamos curiosear en algunas de las situaciones que se nos presentan durante el día, espacios para entrenarnos están a nuestra disposición a cada segundo.

 Amanecer, Parque Tayrona

lunes, 17 de septiembre de 2012

Muy abierto desde lo profundo del interior.

De vez en cuando sal afuera y siéntate,
Por la noche al atardecer
Cuando hay una ligera brisa
que toca tu cuerpo,
Y hace que las hojas y los árboles
se muevan con suavidad.
En realidad, no estás tratando de hacer nada.
Estás simplemente permitiéndote ser,
Muy abierto desde lo profundo del interior,
Sin agarrarte absolutamente a nada.
No traigas a la memoria
algo del pasado, de un recuerdo.
No preveas que alguna cosa debería suceder
No te aferres a algo del presente
Nada de lo que percibes necesita ser
establecido con certeza.
Simplemente deja que la experiencia
tenga lugar,muy libremente
Para que tu vacío, abierto corazón
Sea envuelto por la ternura de
la verdadera compasión.

Chöky Nyima Rinpoche